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«La Casa de Nariño se convirtió en la nueva Casa Estudio»

En las últimas cuarenta y ocho horas el presidente Iván Duque ha dado alarmantes muestras de falta de autoridad. Está oculto en la Casa de Nariño, no aparece y le llueven las críticas

Uno de los grandes ausentes a lo largo de las cuarenta y ocho horas de terror que hemos vivido en la ciudad de Bogotá una vez que policias matasen a golpes de bolillo al letrado Javier Ordoñez en un CAI, ha sido el presidente de la República. Solo 2 intervenciones ha tenido Iván Duque, cortas y también insustanciales.

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Para críticos como Félix de Bedout lo único que le importa al presidente es de qué manera salir en la hora diaria que sale en T.V. en un programa que absolutamente nadie ve, que a absolutamente nadie le importa. Desde el instante en que el gobierno decidió hacer menos pruebas a fin de que las cantidades no se vean mal, la gente le perdió el respeto al virus.

De ahí que le piden en el mes de las matanzas y las manifestaciones sociales, que se deje de comportar como una estrella de cine y actúe, ejercite, le ponga el pecho a la brisa:

Félix no es el único que se pregunta sobre el papel que debería cumplir el presidente en esta crisis. Hay otros aún más duros que el cronista de W Radio:

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Profesor tenia que ir a una sala de internet para poder dar sus clases.

En estos puntos de Bogotá iniciarían próximas manifestaciones contra la Policía